El 17 de noviembre de 1972, siendo las 11:20, el vuelo de Alitalia que transportaba al General Perón aterrizó en suelo argentino. Perón fue trasladado al Hotel de Ezeiza, lugar en el que fue retenido hasta la madrugada del día siguiente, y liberado para dirigirse a la casa ubicada en la calle Gaspar Campos, en Vicente López.
Allí dijeron presente distintos dirigentes del peronismo local y de zona norte, quienes se acercaron a la emblemática residencia de Perón en el partido bonaerense de Vicente López, donde se dieron cita para conmemorar el Día del Militante Peronista, a 44 años de la llegada del líder justicialista tras casi 18 años de exilio.
El acto se llevó a cabo en el jardín de la entrada de la casa, y contó con la presencia de varios representantes de diferentes gremios, referentes del PJ de diversos distritos y del movimiento obrero organizado. Entre ellos asistieron los concejales de Vicente López, Julieta Martínez Moltó, Joaquín Noya y Lorenzo Beccaria .
También estuvieron Malena Cholakian (Concejala de La Néstor Kirchner en Vicente López), Gustavo Matias (referente de la Néstor Kirchner), Eber Lima (referente de la Néstor Kirchner Primera Sección), y Claudia Pagani (referente de la Néstor Kirchner Vicente López), quienes se hicieron presentes junto a un grupo de militantes.
El cierre del acto, convocado por la CGT Zona Norte, estuvo a cargo de su Secretario General José Luis Casares, quien instó a la unidad para volver al gobierno y al poder, y a recordar a los actores que tuvieron un rol preponderante en la recuperación de la democracia y el protagonismo de los trabajadores en la vida política de la Argentina.
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