El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, lanzó un nuevo mensaje instando a actuar cuanto antes si queremos frenar las peores consecuencias del cambio climático. Lo hizo desde su cuenta de Twitter y los medios no tardaron en replicar su pedido.
“Nuestro planeta ha soportado el verano más caluroso jamás registrado. El colapso climático ha comenzado. Todavía podemos evitar lo peor del caos. No tenemos que perder ni un segundo”, publicó.
¿Estarán escuchando los gobiernos y las empresas? ¿O seguirán haciendo oídos sordos con tal de evitar tomar acciones reales y efectivas en el corto plazo?
Los tres meses más calurosos de los últimos 120.000 años
Esta declaración se dio junto a la difusión de un nuevo comunicado en el que la ONU informó que los últimos tres meses que acabamos de vivir son las más cálidos jamás registrados, es decir, de los últimos 120.000 años aprox.
Así como leés: 2023 (de enero a agosto) es el segundo año más cálido registrado. El otro fue 2016 que estuvo bajo los efectos de la corriente de El Niño.
No es de extrañar, entonces, que en agosto se registraran las temperaturas promedio mensuales más altas en la superficie del mar en todo el mundo, alcanzando los 20.98°C.
Todos estos registros surgen de la base de datos de Copernicus que se remonta a 1940. Gracias a esta base puede compararse al clima de los milenios anteriores estudiando los anillos de los árboles y a los núcleos de hielo.
Nuestro clima ya implosionó: del calentamiento a la ebullición
Frente a estos nuevos registros, Guterres describió que: “Nuestro clima está implosionando más rápido de lo que podemos hacer frente, con fenómenos meteorológicos extremos que afectan a todos los rincones del planeta”.
Por si hace falta dar ejemplos concretos, el Secretario General de la Organización Meteorológica Mundial, Prof. Petteri Taalas, enumera:
“El hemisferio norte tuvo un verano extremo, con repetidas olas de calor que desencadenaron incendios devastadores. En el hemisferio sur, la extensión de hielo marino de la Antártida estuvo fuera de todo registro, mientras la temperatura de la superficie marina batió nuevos récords. Y todo esto ocurrió ANTES de ver el impacto total del evento de El Niño”.
Hace un mes, Guterres también habló de la gravedad de lo que estamos viviendo cuando declaró: “La era del calentamiento global terminó. La era de la ebullición llegó“.
Con este nuevo título “ebullición global” marcó un quiebre para resaltar que el nivel de temperaturas más elevadas que se registraron este verano boreal marca que la crisis ambiental alcanzó un “punto crítico”.
En este último informe también se menciona claramente cuál es la causa que nos ha traído a este punto crítico: “los científicos llevan mucho tiempo advirtiendo de las consecuencias de nuestra dependencia de los combustibles fósiles”, resalta el documento.
Por eso, es tiempo de que gobernantes y empresas escuchen lo que la ciudadanía exige y que se implementen las soluciones que pueden frenar las emisiones que calientan el planeta. Nuestro futuro depende de eso.
Fuente: Greenpeace
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