Hoy en este Instituto Pellegrini decimos convencidos que este predio que el gobierno anterior quiso vender, este predio que durante años formó a miles de estudiantes de nuestro querido Pilar y que representa nuestra identidad tiene que seguir siendo un espacio para la educación pública, dijo con contundencia un Achával en un escenario que vestía nuevamente el escudo del Municipio de Pilar, lo que fue otro marcado símbolo de reivindicación de la identidad local.
En un convocado predio, con una audiencia que incluyó a representantes nacionales y provinciales; fuerzas vivas, instituciones intermedias, ciudadanos de Pilar y militancia Achával afirmó: Ustedes saben que yo no creo en las promesas de campaña. Nunca las hice. Creo en la responsabilidad de los compromisos y hay uno que voy a asumir cada día de este mandato que me otorgó el pueblo: el de tener un Estado humano que se haga cargo de los problemas de todos los pilarenses. En ese sentido, mostró definición para ponerse a trabajar rápidamente en las prioridades que la realidad demanda: Como dijo Alberto, tenemos que curar la herida del hambre. Hoy, el escenario con el que me encuentro es desnutrición, pobreza y sarampión. Eso me impone un compromiso de asignar todas nuestras fuerza a dar una respuesta urgente a esa situación.
La decisión de asumir en el Pellegrini, edificio que se encuentra ubicado en la localidad de Villa Rosa, no sólo fue una reivindicación a la identidad y a la educación pública, sino un fuerte mensaje del Estado presente y descentralizado que el nuevo jefe comunal busca recuperar: Queremos funcionarios, secretarios, concejales, caminando en los barrios, al alcance y en contacto con la ciudadanía a la que representamos y siendo siempre comprensivos con quienes más nos necesitan, dijo. Y concluyó: Quiero, que las personas no estén más detrás de las decisiones. Quiero que las personas estén en el centro de las decisiones. Porque para eso caminamos, y para eso llegamos, para transformarle la vida a la gente.
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