La comisaría novena de La Plata, donde el estudiante de periodismo Miguel Bru fue torturado, asesinado y desaparecido hace 28 años, fue señalizada en el marco del Plan que lleva adelante la secretaría de Derechos Humanos de la Nación.
Durante un acto que se realizó , se identificó la dependencia policial ubicada en las calles 5 y 59 como el lugar donde Bru fue detenido y torturado hasta la muerte el 17 de agosto de 1993.
La identificación se realizó en el marco del Plan de Señalización Contra la Violencia Institucional de la Secretaría de DDHH de la Nación y por eso el titular de esa dependencia, Horacio Pietragalla acompañó a Rosa Bru en el acto.
También estuvieron presentes Matías Moreno, subsecretario de DDHH de la provincia de Buenos Aires; Florencia Saintout, diputada provincial y familiares de víctimas de violencia institucional y autoridades de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP, entre otros.
Rosa Bru volvió a reclamar en el acto que el único policía que está detenido les “diga dónde está Miguel” y que no quieren “nombres, solo eso”, además de recordar que se mantiene en silencio «pese a que se le ofreció a la libertad a cambio de que colabore».
En tanto, Pietragalla explicó que en la señalización dice «Argentina unida frente a la violencia institucional porque nadie puede erradicarla sólo».
«Necesitamos el compromiso de los que gobiernan y del poder judicial para que actúe en consecuencia con lo que nuestra democracia está viviendo», recalcó.
La actividad, organizada por la Asociación Civil Miguel Bru junto a la Secretaría de DDHH de la Nación y la Subsecretaría de DDHH de la provincia de Buenos Aires comenzó con una radio abierta y se proyectó una muestra colectiva sobre la lucha por justicia y la búsqueda de Miguel entre 1993 y 2020 y el camino de la Asociación Miguel Bru.
Además, tal como se realiza desde 1999, se inició una vigilia en la puerta de la comisaría que comenzó a las 19 para culminar a las dos de la mañana.
Miguel Bru desapareció luego de denunciar a efectivos de la comisaría novena de La Plata por un allanamiento ilegal en su casa y comenzar a ser amenazado y hostigado para que retirara esa acusación.
Según se acreditó en juicio, el joven fue secuestrado cerca de la localidad de Bavio, en el partido de La Plata, el 17 de agosto de 1993 y las declaraciones de varios detenidos y las pericias en el libro de guardia permitieron comprobar que fue ingresado en esa seccional entre las 19 y las 20, donde fue visto por última vez mientras era torturado.
En 1999, en un juicio oral y público, fueron condenados a prisión perpetua el exsubcomisario Walter Abrigo, quien murió en la cárcel; y el sargento Justo López, por el homicidio y desaparición; mientras que por encubrimiento fueron sentenciados el excomisario Domingo Ojeda y el exoficial Ramón Ceressetto.
En estos 28 años ya se realizaron más de 39 rastrillajes de búsqueda por lo que su familia y la Asociación reclaman que el único detenido en la actualidad, Justo José López, el resto de los policías implicados en la desaparición, o cualquier persona que pueda brindar algún dato, cooperen para poder encontrarlo.
Además, el gobierno de la provincia de Buenos Aires ofrece una recompensa de hasta un millón y medio de pesos a quien aporte un dato que permita encontrar su cuerpo.
Quien tenga información para aportar puede hacerlo con reserva de identidad, presentándose ante el fiscal Marcelo Martini, titular de la Unidad Fiscal de Investigaciones (UFI) 3 de La Plata; los Fiscales Generales de Cámara de los distintos Departamentos Judiciales de la Provincia o ante la Dirección Provincial de Registro de Personas Desaparecidas.
Fuente: Télam
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